Empanadillas de soja
- Manuel Calvo Jimenez
- 22 nov 2020
- 2 Min. de lectura

Las empanadillas las recuerdo como uno de los platos más característicos de la infancia. Se preguntarán el porqué, pero yo me traslado algunos años atrás y veo a mi madre en la cocina haciendo unas deliciosas empanadillas de atún. Estaban realmente buenas, y más, si las hacía ella. No quiero desmerecer a los productos que ya vienen hechos, pero claro está, que cuando uno hace sus elaboraciones, el resultado es cien veces mejor que el comprado. Mi madre solía coger, solamente cebolla, pimiento, tomate, atún y huevo, y con eso y la masa de las empanadillas, redaba un resultado exquisito.
Yo he querido seguir un poco la receta original, pero, en este caso, he cambiado el atún por soja texturizada, la cual queda muy bien de sabor en el producto.
Para los ingredientes usaremos:
- 16 obleas de empanadilla
- 75g de soja texturizada
- 200ml de tomate frito
- 2 huevos
- 1 cebolla pequeña
- 1 trozo mediado de pimiento verde
- 1 diente de ajo
- aceite
- sal
- pimienta
Antes de comenzar, pondremos la soja texturizada en agua durante 20 minutos para ayudarnos a que se ablande. Además pondremos los huevos a cocer en un poco de agua y vinagre.
Una vez dejada la soja, cortaremos la cebolla, el pimento y el ajo en trozos pequeños, y los incorporamos en este orden en un poco de aceite. Sofreímos.
Cuando comiencen a dorarse, añadimos la soja escurrida y mezclamos. Salpimentamos y dejamos que se rehogue todo unos diez minutos. Yo costumbro añardirle un poco de agua para que la soja termine de hacerse.
Pasado el tiempo, incorporamos el tomate, movemos, y dejamos que se haga todo bien durante unos minutos. Retiramos.
Una vez cocidos los huevos y habiéndolos dejado enfriar, los pelamos y los cortamos en cuadraditos pequeños, añadiéndolos a la mezcla de tomate y soja.
Sacamos las obleas de las empanadillas y las colocamos sobre una superficie lisa. En el centro colocaremos una cucharadita del relleno y, cuando tengamos todas las masas con la mezcla, doblamos y cerramos con un tenedor.
Cuando esté terminado este proceso, freímos en abundante aceite hasta que queden con un color dorado. Y una vez fritas, estarán listas para ser disfrutadas.
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